No intento hablarte

No intento hablarte,
no te digo las cosas a ti,
las digo al viento
a ver si pescas alguna
con tu red defectuosa llena de agujeros
y la tomas en tu desayuno
que dicen que te dará fuerzas en todo el día
para amar, tal vez...
aunque necesitas más fuerzas para no herir...

Si, en el desayuno estaría bien,
a ver si así despiertas de una vez por todas...
necesitas despertar!
y mirar que ya amaneció hace bastante rato
aunque tu reloj biológico te diga que son las 3 am
y que aún puedes dormir
y soñar...
y creer que lo que haces no es real,
que algún día podrás vivir tu propia vida,
que ésta es ajena,
que tendrás una segunda oportunidad,
cuando le agotaste las oportunidades a otros que creían en ti
a otros que si sabían que estaban despiertos
y vivían mientras tu aún soñabas,
que caminaban de tu lado,
ellos en la Tierra, tu en un planeta lejano
tejiendo abrigos para la noche aquella en que una mujer lunar te diga que hace mucho frío,
y que ve destellos de luz saliendo de tu corazón,
y que ve formas en las nubes,
y que escucha a Dios,
y que cree en ti y en tus utopías,
y que ama el reflejo sonoro de tus melodías en el mar,
y que ve lo que puedes llegar a ser,
aunque hayas decidido quedarte en casa y llorar...

Créeme, no suelo hablarte a ti,
solo canto,
y parece que te gusta mi cantar,
parece que es un dopaje natural
que acumulado con tu droga interna
ocasionan una macro-psicodelia
que te hace olvidar tus hechos pasados,
aunque haya llanto alrededor de ti,
de los que te amaron mientras dormías...
tu no los notas,
solo me miras
y aun somnoliento me agradeces
por decirte que ya amaneció...